Las 124 empresas más éticas del mundo en 2017 (una de ellas es guatemalteca)

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30 marzo, 2017 por Hugo Cruz Rivas

Dos de las 124 empresas más éticas del mundo son latinoamericanas: la guatemalteca Cementos Progreso, S.A. y la mexicana BIMBO. La empresa centroamericana ha sido galardonada por cuarto año consecutivo como una de las World´s Most Ethical Companies.  La distinción la entrega anualmente ETHISPHERE Institute, una organización estadounidense especializada en la medición de indicadores de cultura ética. Pueden ver la lista completa de las empresas galardonadas en 2017 por medio de este link:  World´s Most Ethical Companies Honorees.

Las 124 empresas abarcan los 5 continentes, repartidas en 19 países y representan 52 sectores empresariales. Algunas de ellas (13) han sido galardonadas hasta once veces consecutivas y otras (8) han recibido el distintivo por primera vez.

La mayoría de las empresas evaluadas por Ethisphere Institute son empresas públicas. Eso les permite hacer un interesante análisis de datos. Por ejemplo, comparan el desempeño financiero de estas empresas galardonadas con las del índice S&P 500, en el período 2015-2016. El resultado muestra que las empresas más éticas del mundo tienen en promedio un 6.4% mejor rendimiento que las de S&P 500.

Fuente: http://worldsmostethicalcompanies.ethisphere.com/

Al realizar esa misma comparación para el período 2013-2016, resulta que la ventaja de las empresas galardonadas por Ethisphere Institute es aún mayor: 9.6% en promedio por encima del índice S&P 500.

 

Fuente: http://worldsmostethicalcompanies.ethisphere.com/

Pero este importante esfuerzo del Ethisphere Institute envía mensajes positivos a todas las empresas en general, sean públicas o no, como es el caso de Cementos Progreso, S.A. ¿Qué puede aprender cualquier empresa de las buenas prácticas de estas 124 World´s Most Ethical Companies?

Ya que conozco de primera mano a Cementos Progreso, S.A. porque les he asesorado en varios procesos relacionados con la ética, puedo dar fe de que hay cosas que ellos hacen que son replicables por otras organizaciones, por ejemplo:

1. Compromiso explícito y efectivo con la ética por parte de la Junta Directiva y de cada uno de sus miembros.
2. Un código de ética robusto: completo, sencillo y exigente.
3. Creatividad y dinamismo en la campaña de difusión interna de los valores de la empresa y sus implicaciones (videos, campañas gráficas de sensibilización)
4. Reconocimiento de buenas prácticas de colaboradores, además de la sanción de las malas prácticas.
5. Un comité de ética activo, integrado por miembros de diversas áreas, con total empoderamiento por parte de la Junta Directiva.
6. Contar con un Oficial de Ética, en este caso concreto una mujer con una larga e importante trayectoria como alta ejecutiva.
7. Campañas de formación ética para el 100% de los colaboradores, desde los miembros de la Junta Directiva hasta los operarios.
8. Apertura a la mejora continua de todos los procesos relacionados con la ética y la medición de sus resultados.

Como siempre he dicho: cuando se quiere, se puede; no importa si es una empresa transnacional, regional o local; no importa si es pública o de capital cerrado; no importa si es de servicios o de industria; no importa si es más o menos pequeña o grande. Lo que importa es el interés genuino de quienes toman las decisiones.

¿Y ser una de las World´s Most Ethical Companies te vuelve una empresa perfecta? ¿Te garantiza un futuro como lecho de rosas? Sencillamente: no. Con galardón o sin galardón, ser una empresa ética permite ser más sostenible, aunque no creo que esto sea poca cosa.